Sara Spalletta
Aunque me cueste un poco
admitirlo confieso que muy a menudo soy dependiente de las TIC. Estas
herramientas impregnan mi cotidianidad a tal punto que estudiar, trabajar,
viajar e incluso comunicar sin ellas sería mucho más complicado, o por lo menos
sería “diferente”, con esto quiero decir que, aunque no soy una fanáTICa, me
resulta difícil imaginar mi cotidianidad sin un ordenador o un móvil. El pacto
con el demonio ya se firmó, no se puede volver atrás.
Ahora vamos a ver cuáles son las
herramientas TIC más significativas para mi formación, mi trabajo y mi vida
diaria.
Messenger
de Facebook y WhatsApp,
desde que nacieron, son sin duda las aplicaciones que más he utilizado a la
hora de comunicar, compartir ideas, información y materiales con amigos,
compañeros de trabajo y familiares.
Skype para mi es vital, debido a que
lo utilizo para no olvidarme de la voz y de la cara de mis familiares y amigos que
están lejos de mí, pero, sobre todo, es la herramienta que desde hace dos años
me permite dar clases de italiano a unas chicas que viven en Inglaterra,
entonces mi trabajo es “Skype-dependiente”. Para compartir material con mis
“alumnas virtuales” utilizo también Dropbox,
un sincronizador de archivos que a través de internet me permite almacenar mis
documentos, acceder a éstos por medio de cualquier aparato, esté donde esté, y
compartirlos con ellas.
Durante mi experiencia como
docente de italiano, francés y también en las clases de lengua española de las
prácticas he podido aprovechar de CMaps
Tools, un software multiplataforma que sirve para crear mapas conceptuales
interactivas a las que se pueden agregar recursos multimediales y que resulta
ser muy útil para organizar, ampliar y compartir conocimientos.
Cuando enseñé francés en un
instituto profesional en Italia todo el profesorado utilizaba el “Registro elettronico Axios”, un
software parecido a ITACA que facilitaba las relaciones entre alumnos, escuela
y familias.
Otra herramienta que considero
interesante para trabajar en las aulas es Voki.
Yo la descubrí el año pasado dando clase de francés y se trata de crear
personajes avatar personalizados que se mueven y reproducen el texto que se les
introduce a través del text-to-speech o grabando la voz . Es fácil de usar,
divertida y se puede aprovechar en distintos contextos didácticos, no solo con
alumnos de lengua extranjera; de hecho favorece la creatividad, permite
trabajar las componentes lingüísticas, es una manera entretenida de exponer un
contenido y de incorporar las Tic en el aula.
Es cierto que para estudiar,
investigar y trabajar el paquete Microsoft
Office ha sido siempre un compañero fiel. Durante este Máster de
Profesorado utilicé por primera vez el Prezi,
parecido al Power Point, para realizar presentaciones. Creo que en las aulas
sería una herramienta útil para que los alumnos presenten sus trabajos. Me parece
más original que el PowerPoint.
Una app que tengo descargada en
mi móvil y que utilizo muy a menudo es el Diccionario
Rae, fundamental a la hora de satisfacer dudas o curiosidades acerca de la
lengua española y que, por supuesto, se podría utilizar también en las clases
con los alumnos.
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